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No tan incendiario


No tan incendiario (Periférica 2014) es incendiario. No sé por qué Marta Sanz, de quien pueden leerse también Lección de anatomía (RBA 2008), la cual no tiene nada que ver con la novela del mismo título de Danilo Kis y Susana y los viejos (Destino 2006), le quita fuego - al menos en su título- a su ensayo literario, a sus reflexiones en voz alta y a media voz, a su revolcón intelectual a tumba abierta. No tan incendiario quema en las manos. Pero más aún, quema las neuronas. Lo devoras desde la primera página. Porque MS hace crítica literaria sin concesiones. En la página 53 me quedé ahí,  quieto: "Los escritores, los pintores, los cineastas comunistas de la primera mitad de siglo eran la vanguardia de su tiempo. No habían necrosado su mirada." Reaccioné y me dije, claro, de eso se trata, no habían necrosado su mirada, de eso va  nuestro tiempo, de habernos muerto antes de vivir intensamente la lectura, la escritura y toda la gestión de relaciones entre ambas. De habernos abandonado a la perversidad inutilizante de la posmodernidad apática y sin fuego en las entrañas. Y sigue: "Simone de Beauvoir, Buñuel, Alberti, María Teresa León, Sartre, Juan Antonio Bardem...no buscaban "complacer" al público: ahora los artistas procuran complacer al público y, más perversamente todavía, los artistas de izquierda buscan complacer al público de izquierda. Son su grupo meta, su target". Pues eso, que Marta Sanz quiere y, creo que consigue poner una pica encima del discurso hegemónico. Y eso lo hace extensible más allá del análisis literario o de la crítica literaria. Por cierto, un escritor-crítico que no he encontrado en el texto, un texto imprescindible de la nueva crítica literaria o de cómo quiera llamarse al arte de poner contra las cuerdas al sistema literario de nuestros días,  es  la obra de Patricio Pron, El libro tachado, un verdadero complemento de este magnifico e incendiario texto: http://elblogdepacoroda.blogspot.com.es/2014/08/el-libro-tachado.html

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