Cuesta hablar de la izquierda con tanto empujón de la derecha. Pareciera que puestos a protegernos, hasta la izquierda se está blindando en sus trincheras de invierno. Y me pregunto, aunque me cueste, como si con ello vulnerara algún códice de honor religioso, si la izquierda además de abanderar manifestaciones, convocatorias, proclamas y otras puestas en escena, no debería hacer más. Ese más no es una exigencia de cuentas. Aunque no estaría de más que la izquierda revisase su actuación en esta crisis. Pero claro, hay dificultades que nombro sin que ello les exima de ciertas responsabilidades. Primera dificultad, a la izquierda del socialismo centrípeto pululan varias izquierdas: altersisistemicas, extraparlamentarias, abertzales de diversa graduación y radicales libres que Alba Rico denomina élites al revés. A estas izquierdas muy fieles a sus principios y militancia les cuesta lograr la unidad de acción y consensos con capacidad de liderazgo. Es gente
El blog de Paco Roda