Foto: Cristina García Rodero La gente está harta, confundida y enfadada. Y sí, suena a tópico de barra de bar. Pero es la manera de soportar esta política de saldo. Ya lo dicen las encuestas: la gente desconfía de la política. Y lo peor, se muestra indiferente. Y que la política nos la chufle o que identifiquemos a los políticos por igual, deja abierta la puerta a los populismos más bastardos, a los Abascales, Riveras y demás alevines del regeneracionismo fascista Nunca creí que tras negar a Sánchez dos veces, Iglesias llegara a tensar tanto el arco de la historia. Y viceversa. Pero ambos opinan que las ofensas se lavan con sangre. Seguir leyendo
El blog de Paco Roda