En julio de este año se cumplieron 60 años de la muerte de un escritor inquietante y polémico. Era bueno. Muy bueno. Pero tu tuvo su etapa fascista y eso lo condenó al ostracismo. Aunque muriese abrazado al crucifijo maoísta del PC. Corresponsal de guerra para Il Corriere della Sera en el frente ucraniano en la segunda Guerra Mundial y combatiente voluntario en la Primera Guerra Mundial, Curcio Malaparte, seudónimo o sobrenombre de Kurt Erich Suckert, ingresó en el Partido Fascista Italiano pero se desengaño a tiempo y poco a poco se fue ganando la enemistad de Mussolini quien lo desterró y condeno a varios años años de prisión.
Si digo que es bueno es porque hay dos obras cumbres de su literatura de guerra. "La Piel" y "Kaput", dos obras maestras del horror, la guerra, la barbarie y la desesperación humana en el escenario y recorrido por la Segunda Guerra Mundial. Son dos crónicas tremendas, brutales y de un lirismo que te encoge el alma que según Malaparte se perdió para siempre en esos años. Son, además dos obras de alta literatura y geoestrategia política. "La Piel" puede servirnos para entender hoy el declive de Europa, iniciado en 1940, según Malaparte. Lean los dos y sentirán un escalofrío en cada línea. Entonces se preguntarán porque este hombre no ha sido reconocido un poco más allá de su excelente biografía
Comentarios
Publicar un comentario