Ir al contenido principal

De líos y enredos


El expresidente del Gobierno Foral,  Miguel Sanz,  anda inquieto con la actual deriva del partido que un día dirigió. Unión del Pueblo Navarro se ha "pepenizado" con rotundidad y de ahí que quiera echar un órdago a la actual presidenta Yolanda Barcina. Llamarla al orden, al viejo orden foral que tan buenos resultados ha dado a toda una casta de mandarines navarros aún por descubrir. Ve como el proyecto que un día quiso garantizar la eternidad a la derecha más reaccionaria de buena parte de Europa, se va a pique de la mano de otra derecha que ya supera los límites del cinismo más bastardo.
¿Sanz anda montando un chiringuito al margen de UPN? No lo sabemos. Aunque lo intuimos. Él dice que todo a las claras. Veremos. De momento un grupo de castizos navarros fieles a las esencias del foralismo más rentable está tratando de generar presión y opinión. UPN acumula pérdida de credibilidad y no es nada seguro que su apuesta, tal y como está actualmente la plantilla gerencial del partido, pueda remontar las elecciones. Sanz, perro viejo, lo sabe. Sabe que hay que volver al "pacto natural" con el socialismo, con ese socialismo que no dudará en pactar con el PP a fin de salvar al reino de España del avance de las izquierdas más frescas y renovadas (Podemos) y la "amenaza" del nacionalismo periférico en Vascongadas y Cataluña.
En Navarra, la amenaza de una posible pérdida de influencia y gobernabilidad de la derecha, es más que real. Es posible. Sanz lo sabe y tratará de salvar de nuevo los muebles con la oferta al socialismo navarro de nueva creación, de la mano de Chivite o Acedo, tanto da que da lo mismo, visto lo visto, de un nuevo pacto de estabilidad foral navarro. Sanz quisiera asegurarse, pese a que Barcina insista en presentarse, un giro "a la izquierda" de su partido para salvarlo de la catástrofe que Barcina parece ignorar. Mientras, la izquierda presenta candidatos a las próximas elecciones autonómicas. EH Bildu presenta  en Navarra a viejas glorias para nuevos tiempos. Servidor duda de la credibilidad de ciertos proyectos que parecieran anclados en resolver el futuro a golpe de pasado. 

Comentarios

Entradas populares de este blog

Miquel Marti i Pol

Hace 15 años escribí este artículo en Noticias de Navarra. Hoy hace 15 años de la muerte de este inmenso poeta catalán.  Mientras algunos políticos analfabetos se enriquecen por el morro, mueren los poetas. A uno el cuerpo le pide mandarle a ese tal Galipienzo uno de los poemas de Miquel Martí i Pol, el poeta-obrero catalán muerto el martes pasado. Pero hay algunos hombres tan necios que si una sola idea surgiese de su cerebro, ésta se suicidaría abatida por   su dramática   soledad. Por eso prefiero seguir leyendo a este inmenso poeta que se ha ido en busca de un mundo donde reconstruir sus utopías. Miquel Martí i Pol fue una de las voces emblemáticas de la poesía catalana y un referente imprescindible de la identidad catalana.   Un escritor de enorme carga emocional, un hombre que construía versos con los que se jugaba la vida en cada instante. Un obrero de toda la vida que empezó a trabajar a los catorce años en una fábrica de Rod...

Minuto

No podré votar por Yala Nafarroa con Palestina para que lance el txupinazo y el cielo se avergüence. Así que dejaré aquí mi voto. Creo que el resto de propuestas tienen tiempo de lanzarlo. El año que viene, si viene, o el que sea. Sin embargo Gaza no puede esperar. Aun con nueva tregua trampa. Que Yala lance el txupinazo será un acto simbólico de gran impacto internacional. Y será, como no podría ser de otra manera ,un acto político. Claro, como tantos gestos diarios revestidos de inocencia viciada. Porque no se puede pasar de puntillas, ni ser equidistante, ante esta masacre gazatí. Porque hasta el silencio miedoso y colaboracionista que inunda el mundo, también es político. ¿Te suena de algo Melody? Pero además, Yala no es una candidatura personal, cuestión que deberíamos revisar en favor de lanzaderas colectivas si reclamamos fiestas fusionadas e inclusivas. Yala, agrupa a 225 colectivos sociales y ONGs frente al genocidio y ocupación palestina. Y llevan años. Pero Yala ...

El viejo pino

El viejo pino no aguantó la embestida de un viento sin piedad, un viento enloquecido, como una llamada de teléfono de desamor. Dicen que cayó a cámara lenta, como queriendo agarrarse al último suspiro de sus resecas raíces. El viejo pino tenía más de cien veranos y había sido testigo de noches de amor y de todas las lunas, de tormentas, granizos, vientos cierzos y “castellanos” y también de alguna guerra aún sin cicatrizar. Fue refugio de cientos de nidos y testigo mudo de miles de vuelos que los cernícalos convertían en piruetas de amor y de muerte. Cada año, llegado septiembre, cuando la luz desciende sobre los pimientos recién asados, el pino crecía varios milímetros. Lo hacía, dicen, para oír mejor el repique de campanas que anunciaban una procesión desde tiempo inmemorial. Y también dicen, quien lo ha visto crecer, que en algunas noches recargadas de estrellas, se podía oía su respiración que sonaba como un gemido. Entonces, algunas gentes se arrimaban a su tronco para encontrars...